Uso no sexista del lenguaje


Uso no sexista del lenguaje
Respecto al lenguaje, debemos considerar la importancia del mismo en la representación del mundo que nos hacemos las personas; la cuestión del lenguaje no es una cuestión baladí, ni un anexo sin importancia.
Las personas representamos el mundo a través del lenguaje y, de manera bidireccional, el mundo se nos presenta a través del lenguaje. De este modo, hace ya mucho tiempo que quienes estudian sociolingüística saben que “lo que no se nombra, no existe”. Ejemplo: las guerras de las que se deja de hablar, parece que desaparecen, ¿qué sabemos hoy en día de Somalia? ¿nos preocupa? No, porque ya no lo nombramos ni lo oímos, luego deja de ser una preocupación.
Esto es algo que saben muy bien los medios de comunicación, de hecho los temas de sus agendas están muy bien estudiados, porque saben que lo que ellos traten será un tema presente en la sociedad, de ahí el poder de estos medios.
Si no nombramos a las mujeres, éstas se ocultan en el mensaje y en la realidad, no somos conscientes de su presencia, masculinizamos el mundo a la vez que usamos el masculino pretendidamente genérico. Al hacer uso sólo del género gramatical masculino, hacemos que la mitad de la humanidad no sea nombrada, luego, estamos invisibilizando a esa mitad de la humanidad.
En algunas ocasiones se han escuchado críticas al uso no sexista del lenguaje, como algo accesorio, algo sin importancia; sin embargo, las autoridades en estudios de género resaltan siempre la importancia del uso no sexista del lenguaje.
Por ello, es necesario un esfuerzo que nos lleve a aprender de forma adecuada el uso no sexista del lenguaje. Hablamos de aprenderlo porque se hace necesario que ese lenguaje sea dinámico, no repetitivo, fluido,… y para ello, hay que tener un aprendizaje. Tenemos la facilidad, actualmente, de contar ya con muchos textos escritos perfectamente con un uso del lenguaje igualitario, equilibrado y justo y con una abundante bibliografía que nos ayuda a hacer un uso no sexista del lenguaje, dándonos, incluso soluciones concretas a situaciones comunicativas puntuales. Efectivamente, existen numerosas posibilidades de hacerse con un manual de uso no sexista del lenguaje; de hecho, en internet nos encontramos con varios de estos manuales de manera gratuita.
Además, aquellas personas que nos posicionamos a favor de una educación en igualdad, abogamos por mostrar un lenguaje en consonancia con nuestro posicionamiento, un lenguaje que refleje nuestra ideología de vida y que transmita a la sociedad la importancia de nombrar al cien por cien de la humanidad. Demostramos, pues, con nuestra forma de expresarnos que queremos un mundo igualitario, inclusivo y equitativo.
Por lo tanto, una de las primeras cuestiones a tener en cuenta cuando afrontemos la educación para la igualdad, será la del uso no sexista del lenguaje; así como un cuidado especial a este respecto en todos aquellos carteles, anuncios, posters, etc. que se usen en el centro escolar, porque todo ello será importante para la educación no sexista de nuestro alumnado y marcará la cultura de igualdad de nuestro centro.

Queremos coeducar. Mª Antonia Moreno Llaneza